Fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. La postulaci??n hab??a sido presentada en 2014 por el Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires. Rese??a hist??rica de un hecho cultural.

???En el 2009 logramos incluir al Tango en el cat??logo del patrimonio cultural mundial y ahora es el turno del Filete, una expresi??n singular y representativa de la Ciudad de Buenos Aires, y por extensi??n del pa??s, que la convierte en referente de la identidad porte??a y nacional. Esta declaraci??n ayudar?? a potenciar y promocionar esta tan peculiar t??cnica pict??rica y adem??s obliga al estado a proteger la actividad y realizar acciones para desarrollarla. Esta distinci??n que nos otorga hoy la UNESCO es un enorme orgullo para la cultura popular argentina??? destac?? Hern??n Lombardi, Ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires.

En la lista representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, el pa??s solo inscribi?? al Tango en el a??o 2009, en una presentaci??n conjunta con Uruguay, que tambi??n fue impulsada por el Ministerio de Cultura de la Ciudad. En el caso del Filete es la primera propuesta Argentina que llega a ser declarada.

Esta presentaci??n ante la UNESCO se realiz?? a partir de un trabajo conjunto entre diversos integrantes de la comunidad involucrada y un equipo de antrop??logos, soci??logos y realizadores audiovisuales del Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires. La tarea, abordada desde distintas modalidades (talleres de debate y reflexi??n, observaci??n de procesos de trabajo en espacios y soportes diversos, entrevistas y filmaciones) permiti?? establecer la caracterizaci??n del elemento propuesto y su significaci??n social en tanto lenguaje visual que expresa contenidos y valores identitarios y, por ende, estimula su apropiaci??n por distintos grupos socio-culturales. As??, aport?? tambi??n a la sensibilizaci??n y concientizaci??n sobre la importancia del Patrimonio Cultural Inmaterial en general.

CELEBRACI??N EN EL OBELISCO

Para celebrar esta designaci??n, el pr??ximo domingo 6 de diciembre se realizar??n en el Obelisco una serie de actividades. El evento comenzar?? a las 17 horas al ritmo de la murga en la Plaza de la Rep??blica. All?? habr?? una muestra con piezas originales de Filete del Museo de La Ciudad y colecciones particulares, que incluye obras de Martiniano Arce, Jorge Muscia, Memo Caviglia, entre otros artistas. Adem??s se exhibir??n colectivos y camiones filetados y distintos fileteadores contempor??neos realizar??n este oficio en vivo. A las 19, se presentar?? la Orquesta de Tango de la Ciudad de la Buenos Aires. M??s tarde el Obelisco ser?? parte de una performance multimedia sobre el Filete porte??o y a partir de las 21 se realizar?? una gran milonga abierta con DJ Vivi La Falce y clases de Tango.

Por otra parte, desde el viernes y en simult??neo con los festejos, se podr?? visitar la exposici??n del Filete porte??o en las instalaciones del Polo Bandone??n, ubicado en Puente Alsina. El Museo de la Ciudad, responsable de la salvaguarda del filete porte??o, expone una veintena de filetes que recorren hist??ricamente la evoluci??n del mismo desde los maestros fileteadores Luis Zorz, Enrique Brunetti, Carlos Carboni, entre otros. La entrada es gratuita.

EL FILETE EN LA CIUDAD DE BUENOS AIRES

El estilo pict??rico del filete porte??o est?? ligado a la ciudad por: 1) sus ornatos y volutas inspirados en molduras y herrer??a de la arquitectura de estilo franc??s que abunda en la ciudad; 2) su iconograf??a que recupera personalidades destacadas de la cultura porte??a y argentina; 3) su tradicional v??nculo con el tango y m??s actual con la murga (filete sobre bombos y levitas).

Por tratarse de un oficio, que responde a las exigencias de quien lo demanda (otro trabajador), el filete recoge s??mbolos de devoci??n popular como escudos de los clubes de f??tbol, ??dolos de la m??sica o ??conos religiosos; y tambi??n cristaliza frases, refranes y sentencias del saber popular. A diferencia de la t??cnica, estos elementos son los que muestran mayor variaci??n a lo largo del tiempo, porque recogen los usos preponderantes en cada ??poca.

Actualmente, los barrios con m??s filete son San Telmo, la Boca, Boedo y el Abasto. El hecho de que sean filetes actuales muestra la vitalidad de la pr??ctica.

RESE??A DE LA HISTORIA DEL FILETE PORTE??O

La t??cnica pict??rica del Filete Porte??o es una tradici??n mayormente urbana que comienza con el arribo de amplios contingentes de inmigrantes europeos entre fines del siglo XIX y principios del XX. Cambiando de soportes y de motivos, el filete acompa???? la transformaci??n de Buenos Aires en gran metr??poli, sosteni??ndose con altibajos hasta el d??a de hoy.

En su momento de surgimiento, el filete porte??o era practicado como oficio y trasmitido bajo la relaci??n de maestro-aprendiz. Inicialmente, era solicitado para la decoraci??n de carros tirados a caballo y luego de camiones y colectivos, de manera que muchos fileteadores fueron empleados permanentes de las carrocer??as. Hacia mediados de la d??cada de 1970, hab??a alcanzado una notable visibilidad en el espacio p??blico, momento en que su demanda comienza a disminuir. No obstante, desde entonces los fileteadores siguieron haciendo trabajos publicitarios en carteles y vidrieras, mientras que algunos se adentraron en el arte de caballete.

Los servicios del fileteador eran (y en gran medida todav??a son) solicitados por otro trabajador urbano, que buscaba imprimirle un sello personal a su veh??culo o comercio, mediante frases ???generalmente escritas en lunfardo???, ??conos religiosos como la Virgen de Luj??n o ??dolos populares como Gardel y Evita, con los que se identificaba. De esta forma, el filete se convirti?? en un verdadero medio de expresi??n colectiva asociado al mundo del trabajador, que sumado al hecho de ser un estilo pict??rico desarrollado como oficio, lo consolid?? como un elemento distintivo de la cultura popular porte??a.

En el a??o 1970, momento que puede calificarse como ???de apogeo???, los artistas pl??sticos Nicol??s Rubi?? y Esther Barugel se propusieron llevar el filete a una galer??a de arte, ofreciendo una mirada controvertida de este viejo oficio. En un libro publicado con ayuda del Fondo Nacional de las Artes, relatan los inconvenientes sorteados para dar con los fileteadores y convencerlos de participar de la exposici??n como del esfuerzo que debieron hacer para conseguir una galer??a que accediera a exponer tablas de carros fileteadas. Asimismo dan a conocer los resultados de la ??nica investigaci??n desarrollada hasta ese momento sobre los inicios y expansi??n del filete acompa??ada de cuantiosas fotograf??as a color, motivo por el cual actualmente los fileteadores y fileteadoras lo consideran la ???Biblia del Filete???. En dicho libro, transcriben lo que Carlos Carboni, uno de los grandes maestros fileteadores, dijo el d??a en que se inaugur?? la exposici??n: ???Me asombra que la gente se asombre de lo que hasta ayer no le asombraba??? (Rubi?? y Barugel 1994: 140), dando cuenta de lo ???invisible??? que era esta expresi??n art??stica para los cultores del arte consagrado por la cr??tica y el mercado.

Sin embargo, mientras ganaba espacio en el circuito del arte, lo perd??a como oficio. Con la prohibici??n de la tracci??n a sangre en la d??cada del 60 y del uso del filete en los colectivos en el a??o 1975, sumado al cierre de muchas f??bricas de carrocer??as por la entrada de camiones importados, se perdi?? uno de los soportes de mayor visibilidad en el espacio p??blico, produciendo la impresi??n en los ciudadanos porte??os de que el oficio de fileteador hab??a desaparecido, al tiempo que efectivamente el fileteador perdi?? una fuente importante de trabajo.

Los a??os 90 trajeron una nueva amenaza para el oficio, cuando la aparici??n de la tecnolog??a del plotter, que posibilitaba la impresi??n a bajo costo de carteler??a de gran tama??o, desplaz?? el trabajo artesanal del fileteador. Para entonces, la visi??n generalizada ???manifestada en los titulares de algunos diarios de la ??poca??? era que el oficio del filete se hab??a extinguido. Martiniano Arce, considerado ???el ??ltimo fileteador???, fue declarado personaje ilustre de la Ciudad de Buenos Aires por ordenanza municipal en 1996 (Bolet??n Oficial del Consejo Deliberante de la Ciudad de Buenos Aires, 03/02/1997).

Pero parad??jicamente, las condiciones adversas para el desarrollo del oficio reci??n mencionadas estimularon que, por un lado, los maestros fileteadores empezaran a dar clases fuera de los espacios de trabajo; y, por otro, que muchos hombres y mujeres quisieran aprender esta t??cnica como forma de resistir a la estandarizaci??n de la imagen tanto por lo que ten??a de artesanal como de tradicional. Esta revalorizaci??n del filete fue potenciada por el fen??meno de resurgimiento de identidades locales que se dio como contracara del proceso globalizador (Bayardo y Lacarrieu, 1999).

Por otro lado, el incremento del turismo internacional fomentado por la devaluaci??n de la moneda nacional posterior al 2001 potenci?? a??n m??s al filete, que ahora se ofrec??a al extranjero como un producto artesanal t??picamente porte??o. Una vez m??s, acompa??ando los cambios urbanos, barrios como San Telmo o La Boca, frecuentemente visitados por turistas, son los que actualmente concentran la mayor cantidad de filete en comercios y el espacio p??blico en general.

FILETE PORTE??O. T??CNICA PICTORICA TRADICIONAL

Se trata de una t??cnica pict??rica a la que la comunidad refiere como un ???arte popular??? porque, entre otras razones, est?? visible en el espacio p??blico y no es ense??ada en instituciones de educaci??n formal. Si bien su pr??ctica requiere un complejo proceso de aprendizaje y una profunda destreza, nunca fue reconocido oficialmente como parte de las artes pl??sticas.

En tanto t??cnica pict??rica, consiste en la creaci??n de dise??os ornamentales originales a partir de ciertos elementos tradicionales y reglas de composici??n visual. Se caracteriza por el uso de brillantes colores, el efecto de volumen creado por contraste de luces y sombras, y la saturaci??n del espacio.

El trabajo comienza con un dibujo realizado en papel que luego se traspasa al soporte a trav??s del ???esp??lvero??? (papel punzado) y la ???mu??eca??? (tela rellena con tiza). Para pintar se emplea esmalte sint??tico, ???yapan??? (barniz con color) y pinceles de pelo de oreja bovina (de 4 a 6 cm).

El repertorio de elementos en la ornamentaci??n es diverso pero finito. Fundamentalmente incluye hojas de acanto, espirales, volutas y filigranas. Los marcos encuadran el dise??o y las llaves dividen el espacio compositivo. Tambi??n son habituales cintas y mo??os, principalmente, con los colores de la bandera argentina, junto con flores, p??jaros, caballos y animales fant??sticos. Los ??conos, delimitados por un ??valo, son generalmente ??dolos populares o im??genes religiosas significativos para la comunidad ampliada. Las letras, con volumen y decoraci??n interior, recrean frases o sentencias del refranero popular, frecuentemente en lunfardo, una forma de lenguaje tambi??n propia del tango.

LA ???COMUNIDAD??? DE FILETEADORES Y FILETEADORAS

Hacia 2012, un importante grupo de fileteadores y fileteadoras constituy?? una asociaci??n que re??ne a practicantes del oficio, aprendices y otros interesados que identifican al filete como un patrimonio compartido con el resto de la comunidad, detentando adem??s saberes espec??ficos y fomentando su pr??ctica.

El filete porte??o es valorado por una comunidad m??s amplia que lo reconoce en su entorno cotidiano. Aqu?? se incluye a proveedores, como el fabricante de pinceles; y a quienes solicitan su trabajo, como empresas y choferes de transporte de personas y mercader??as, murgueros (murgas de carnaval), milongueros, comerciantes, coleccionistas y tradicionalistas (personas y organizaciones vinculadas a la preservaci??n de tradiciones nacionales). Finalmente, por tratarse de una ornamentaci??n sobre bienes ubicados en el espacio p??blico, el filete permanece visible a los transe??ntes, que lo identifican como parte de su patrimonio cultural.

El filete es ampliamente valorado en la ciudad de Buenos Aires y en gran parte de la Argentina. Hist??ricamente, el sentido atribuido a esta ornamentaci??n fue asociado a la prosperidad en el trabajo. Choferes de transporte colectivo de pasajeros y de camiones frecuentemente solicitan el nombre de sus hijos, el escudo de su club de f??tbol preferido o frases que lo identifican, dise??os originales que le confieran un car??cter personalizado a su veh??culo.

Actualmente incorporado a otros soportes, quienes solicitan filete para decorar sus bienes de uso personal y laboral, tambi??n suman sus intereses, gustos y valores. El filete se recrea entonces de forma novedosa, relacionando la t??cnica tradicional con la iconograf??a del presente. Es justamente en esta ??poca signada por la producci??n estandarizada y el uso de la tecnolog??a que esta pr??ctica se valora como un trabajo manual y artesanal con el que la comunidad se identifica y que reconoce como propio. As??, el filete porte??o constituye un referente en la construcci??n de la identidad porte??a y nacional, asociado con otras manifestaciones culturales locales como el tango y las murgas (carnaval).

La t??cnica pict??rica del filete porte??o se practica principalmente en la ciudad de Buenos Aires y, en menor medida, en sus afueras y en otros centros urbanos del pa??s. De ah?? viene su adjetivo de «porte??o», que lo asocia al puerto y el desarrollo de la vida urbana.

Si bien es posible encontrar filetes en cualquier parte de la ciudad, los barrios que m??s lo concentran en el espacio p??blico son aquellos donde tradicionalmente se desarrollaron actividades vinculadas al abasto de mercader??as, como el Abasto, San Telmo y La Boca y/o identificados con el tango, como tambi??n lo son Boedo y Pompeya. En el caso de los barrios que adem??s reciben alta afluencia de turista, estos valores tradicionales para el porte??o confluyen con la valoraci??n actual de los turistas.

TRANSMISI??N DEL CONOCIMIENTO
Los fileteadores son los principales portadores y practicantes del filete porte??o como t??cnica pict??rica, que transmiten a quienes desean aprenderlo. Los que ense??an son personas que, gracias a su trayectoria en la pr??ctica del oficio y la calidad de su trabajo, se convirtieron en referentes tanto para el resto de los portadores como para la comunidad ampliada.

En sus comienzos, el filete se desarroll?? en ??mbitos laborales tradicionalmente masculinos, como empresas de fabricaci??n de carros o de transporte colectivo de pasajeros, por lo que los practicantes eran hombres. Entre ellos, algunos se recuerdan y son admirados hasta la actualidad, siendo referidos como los grandes ???maestros fileteadores???.

En las ??ltimas d??cadas, la ampliaci??n de soportes y espacios de trabajo propici?? la inclusi??n de las mujeres como aprendices de la t??cnica, muchas de las cuales tambi??n comenzaron a practicarlo como oficio. Si bien no hay unanimidad sobre este punto, algunos de los practicantes reconocen el nacimiento de una nueva est??tica dado por la mano femenina.

Para practicar la t??cnica como un oficio, las personas tienen que pasar por un per??odo de aprendizaje previo, variable seg??n sus aptitudes, hasta que logran la destreza necesaria y desarrollan un estilo propio. Entonces su talento es reconocido por la comunidad y sus trabajos empiezan a ser solicitados. De esta forma, se preservan los principios fundamentales de la t??cnica, al tiempo que puede ser recreada y aplicada en nuevos contextos y soportes de acuerdo con las inquietudes del fileteador y las necesidades de los solicitantes de su trabajo.

Para m??s informaci??n www.fileteypatrimonio.com.ar

Fuente: PRENSA MINISTERIO DE CULTURA PORTE??O